La electro-conductividad (EC) en el cultivo de plantas
La Electro-Conductividad, también conocida como EC, es la medida que indica la capacidad que tiene cualquier elemento para conducir la electricidad. En agricultura se utiliza para averiguar la cantidad de electrolitos que tiene el suelo y la solución nutritiva con el que vamos a regar nuestro cultivo. A mayor número de electrolitos mayor será la electro conductividad y por lo tanto mayor serán las sales y partículas minerales que contiene la solución. La CE es un indicador significativo de la calidad del agua, la salinidad del suelo y la concentración de fertilizantes. En cualquier blog o revista de tutoriales para cultivar plantas leerás frecuentemente este término, conocer su significado será vital para mantener el jardín vivo y sano.
Las sales que calculamos con el EC son los nutrientes NPK, entre otros, que se utilizan en los fertilizantes comerciales para alimentar nuestro cultivo. Aunque el EC es muy útil conocerla, únicamente le dará información básica, no le dirá, por ejemplo, qué tipos de sales hay en la solución de riego. La electro-conductividad es un factor que influye en la capacidad de una planta para absorber agua, niveles muy altos o bajos pueden causar bloqueos nutricionales graves, reducir la producción, ralentizar el crecimiento incluso la muerte total de la planta.
¿Cómo reducir la EC del agua de riego?
Las recomendaciones para eliminar las sales fertilizantes de los medios dependen de las causas del problema. Lo primero de todo es detectar el motivo exacto por qué el EC es alto para su corrección. Para reducir la concentración de sales en la solución de riego es mucho más sencillo y poco a poco irá bajando el EC del suelo. Algunos cultivadores utilizan agua filtrada por ósmosis inversa que baja casi a 0 los niveles. Mediante este proceso se elimina absolutamente todo, dese sales minerales, a sustancias químicas como el cloro, o pesticidas, metales pesados, virus y bacterias….
Al filtrar el agua con un sistema de Osmosis estaremos empezando de cero, reduciremos el EC a casi unidades imperceptibles y luego podremos ajustar la nueva concentración de sales al nivel que deseamos.
¿Cómo aumentar la EC del riego?
Aumentar los niveles de EC es de lo más sencillo que existe si entendemos la descripción de lo que significa la medida en sí. Como hemos comentado, la electroconductividad depende de las sales o minerales que flotan en el agua de riego, a más fertilizante mayor será los niveles de EC. Si tras medir la electroconductividad el agua esta medida sigue siendo baja deberemos aplicar más abono de la fase en la que se encuentre el cultivo. Recomendamos medir la solución nutritiva del riego de forma ocasional, así como del pH, y controlar los niveles antes de que sea aplicada a la planta. Por regla general, los niveles de EC deberán ser aumentados durante la floración, ya que es el momento donde más nutrientes necesita el jardín.
¿Cómo afecta el nivel de EC en las plantas?
En el planeta existen millones de especies vegetales diferentes. Obviamente no todas ellas tienen las mismas necesidades. Unas soportan mejor niveles extremos de sales o EC mientras que otras son muy sensibles a las sales y prefieren ambientes más ligeros. El objetivo de cualquier programa de nutrición es suministrar nutrientes al medio de las raíces a un ritmo similar al que absorbe la planta y para acercarnos a este objetivo la mejor forma es medir la EC de forma regular y saber la EC máxima que soporta la especie plantada en el jardín. Los siguientes rangos podrían ser aptos para la mayoría de plantas, pero recuerda siempre consultar información detallada para cuidar el tipo de cultivo que tengas entre mano de forma específica:
- Entre 0 y 0,25: Medida exageradamente baja, posiblemente de agua osmotizada casi pura y sin nutrientes. Las plantas sufrirán carencias y enfermedades en pocos días por la debilidad.
- Entre 0,25 y 0,75: Para la mayoría de las plantas estamos ante un rango bastante bajo, pero para plantas sensibles a las sales como plántulas pequeñas y esquejes recién enraizados nos servirá.
- Entre 0,75 y 1,25: Rango óptimo para la mayoría de las plantas establecidas. En estos niveles casi todas las plantas son capaces de crecer y florecer a máximo rendimiento.
- Entre 1,25 y 1,75: Nivel de EC ligeramente más alto de lo deseable. Las plantas más sensibles perderán velocidad de crecimiento, vigor y sufrirán de excesos. Las plantas de altos requerimientos nutricionales, sobre todo en flora, podrían seguir formando frutos de forma óptima en la mayoría de los casos.
- Entre 1,75 y 2,25: En estos límites el crecimiento lento y las enfermedades estarán presentes de forma generalizada. El follaje sufrirá de marchitez, pérdida de color y quemaduras de las puntas.
- Más de 2,25: Niveles tan altos atienden a una acumulación excesiva de sales y minerales. Casi cualquier tipo de planta sufrirá graves daño por sal, perdiendo el ritmo de crecimiento y floración e incluso enfermando por quemaduras y bloqueos alimentarios. Los microorganismos beneficiosos como los hongos micorrizas y bacterias fijadoras reducirán su activad considerablemente.
¿Cómo medir el EC en el cultivo?
La mejor forma de calcular los niveles de electro-conductividad de la solución nutritiva o del sustrato para planta es utilizar aparatos medidores digitales con sonda impermeable. Estos aparatos no son muy caros y son capaces de calcular la medición exacta en apenas unos segundos. Los medidores de Ec deberán calibrarse antes de su uso, así como limpiarlos completamente después para no contaminar con sales de mediciones anteriores.
Medir la Ec del suelo no es tan sencillo como medir la del agua de riego. Para calcular la electro-conductividad de un terreno deberemos utilizar electrodos insertados en el suelo y conectados a un lisímetro. Un proceso más caro y costoso tanto en tiempo como en esfuerzo. Personalmente, no es complicado encontrar un laboratorio que analice una muestra en poco tiempo y sin un coste económico excesivo.